lunes, 28 de diciembre de 2015

RANKING DE LAS 10 MEJORES UNIVERSIDADES 2015

¿En qué universidad debo estudiar? 

Es la pregunta que muchos jóvenes se están haciendo en estos momentos y cada año la revista Qué Pasa ayuda a contestarla, elaborando un ranking con las MEJORES UNIVERSIDADES 2015.

Dicho ranking se elabora de acuerdo a los siguientes factores: 
  1. La percepción de calidad que el mercado laboral asocia a cada plantel.
  2. La calidad de la gestión institucional, de los académicos y de los alumnos.
  3. Los niveles de investigación alcanzados por las casas de estudios.
A continuación se presenta un cuadro ilustrativo:

(cuadro extraído de la revista Qué Pasa, versión online)

Espero que les sirva de orientación.

Que tengan un buen día.

Karolina Sánchez.

jueves, 17 de diciembre de 2015

¿SERÁ QUE NUESTROS ACTOS DEFINEN NUESTRA EDUCACIÓN?



Cada día la vida nos demanda más exigencias. Es muy común ver en las calles a las personas corriendo de un lado para otro, con la cabeza gacha, sin expresión en sus rostros. Viajar en metro es todo un desafío, entre empujones subimos y bajamos de los vagones. El calor nos sofoca, los bultos de la señora del lado, el sudor del tipo que va delante de ti y que a toda costa no quieres sentir, no ayudan mucho a tener un viaje placentero. Llegar al trabajo y sentir que sólo cumples con tus obligaciones sin disfrutar lo que haces. O a lo mejor tú si disfrutas tu trabajo, pero tu compañero lo detesta y lo hace notar todos los días, produciendo una sensación de mala onda en la oficina. Y para que decir lo que es manejar en calles atestadas de vehículos con ruidos ensordecedores que sólo incrementa la frustración de no poder salir luego de ahí.
Llega un punto donde lo único que quieres es salir volando al lugar de tus sueños y desconectarte de tanto malestar porque sientes que estás a punto de explotar. Es en ese momento cuando a veces las reacciones no son apropiadas y perjudican no sólo a quien las realiza sino a quienes están a su alrededor también. Es ahí cuando vemos como el hombre que va caminando con su cabeza gacha tropieza sin querer y pasa a llevar al hijo de otra persona y este último reacciona violentamente sin pedir explicación alguna. Es ahí cuando te suben al vagón del metro y quedas apretado entre la multitud sin saber de dónde afirmarte y la persona que está delante de ti te reclama por estar empujándola. Es ahí cuando desearía decirle a tu compañero que se busque otro trabajo y que no siga intoxicando al resto con su mala oda. Es ahí cuando te encuentras con un inmenso taco y el tipo de al lado toca desenfrenadamente la bocina de su auto, agravando aún más la situación sin preocuparle el accidente que hubo más adelante.
Son en esos momentos cuando olvidamos que cada uno de nosotros tiene su propio mundo, con sus bellezas y atrocidades. Antes de sobre reaccionar deberíamos anticiparnos y ponernos en el lugar del otro porque no sabemos cómo ese mundo afecta positiva o negativamente a la otra persona.  Sería mucho más placentero si intentáramos sonreír más, ser amable, entregar más cariño y comprensión.
Porque al fin y al cabo, eso nos hace vivir en un mundo más acogedor, porque al final eso es lo que deberíamos transmitir a nuestros hijos. ¿No será eso parte esencial en la formación de la persona y así como dice Cantinflas “como tratas a las personas es lo que define tu educación”?

¿Qué opinas?

Karolina Sánchez

lunes, 14 de diciembre de 2015

PALABRAS QUE MARCAN

Cuando nos dicen: "Lo dije sin querer", "No sabía que te iba a doler tanto", "lo dije porque estaba enojada", "Le pones mucho color, si lo dije por decir", sólo agravan la falta.

Muchas veces decimos cosas sin pensar, o decimos cosas de las cuales después nos arrepentimos, y terminamos dañando a quienes más amamos.

A continuación les copio un texto que no tiene autor conocido, pero que lo encontré buenísimo porque grafica muy bien lo destructivo que puede ser el poder de la palabra.


Tengamos cuidado con lo que decimos, en especial si lo decimos a los niños.



“"No te van a querer ni los perros", era la frase que ella siempre usaba para retar a sus hijos cuando se portaban mal. Primero, venía el pellizcón, y después, como de remate, esta frase punzante, aguda. Seguramente, si le preguntan, ella los educó con amor. Y en nombre del amor, dijo frases como estas...


"¿Quién quiere otro choripán?", preguntó Carlos en el cumple de su hija. Ella estaba festejando sus 19 y él se había ofrecido de asador. "¿Quién quiere otro choripán?", insistió. "Vos no, mi amor, que estás muy gorda", fue la frase que disparó delante de todos sus amigos. Ella se puso roja de vergüenza, un nudo enorme le cerró la garganta y no comió más. Se levantó despacio y la soledad de su cuarto adolescente fue el mejor refugio hasta la madrugada del día siguiente. El padre murió preguntándose qué hizo mal esa noche.

"Vamos, no seas mariquita", le dijo su profesor de natación cuando él –que en ese momento tenía 6 años– pidió una toalla al salir de la pileta porque tenía frío. Y todos sus amigos empezaron a reírse. "Mariquita, mariquita", le gritaron. Y el profesor, lejos de hacerlos callar, los alentó. Nunca más volvió a nadar. (Y nunca, en 34 años de vida, apoyó sus labios en los labios de una mujer.)

"Sos un elefante dentro de la clase", le dijo su profesora de Dibujo el primer día del primer año del secundario. Ella venía de un primario impecable, donde Dibujo era su materia preferida. Y era, para hacer honor a la verdad, una joven promesa. Ese año, se llevó Dibujo a diciembre. Volvió a dibujar 28 años después, cuando –terapia mediante– descubrió cuánto la había inmovilizado esa frase.

El Perito Moreno fue el lugar elegido para festejar sus 10 años de casados. Caminata por el glaciar, todos los turistas en hilera para no resbalarse. Ella iba delante; él, detrás. "Tu culo me tapa todo el sol", fue la frase que eligió él para hacer un chiste. Y no entendió por qué esa noche ella se encerró en el baño a llorar.

Son frases que no te matan, pero te marcan para toda la vida. Frases de mierda. No importa cuántas horas de terapia le dediques a deshacerlas, ellas están ahí... rondando, para reaparecer sin previo aviso. Son frases que, cuando las contás, te parece que estás exagerando, que no pudieron ser así, que quizá las recordás mal... Entonces descubrís la crudeza de esas palabras.

Lo bueno es que un día, porque ese día –créanme– finalmente llega, te sacas uno por uno todos los puñales que te clavaron en el cuerpo y en el alma, te haces un sana, sana, colita de rana y descubrís que no fueron dichas con odio, que los responsables de escupirnos tamañas frases son seres que cargan, a su vez, con otras frases. Y entonces llega el perdón. Y perdonamos. Más adelante –bastante más adelante– viene la compasión. Es ahí cuando volvemos a sentirnos felices, con ganas de caminar sobre el Perito Moreno más allá del tamaño de nuestro culo, de nadar y gritar: "Tengo frío, tráeme una toalla", de hacer una lista con toda la gente que te quiere. Porque no solamente te quieren los perros...

Tratemos de pensar antes de hablar... ya que las PALABRAS QUE DUELEN tardan muchos años en salir del corazón del otro, y hasta a veces no salen... No perdamos tiempo con los que queremos, porque perdonar lleva mucho tiempo... PENSEMOS ANTES DE HABLAR... TRATEMOS DE NO HERIR EL CORAZÓN DE LOS QUE MAS AMAMOS...
"PALABRAS DE AMOR, ALEGRAN EL CORAZÓN"...

Autor desconocido.

Que tengan un buen día.
 Karolina Sánchez

jueves, 3 de diciembre de 2015

FELICITACIONES LUCAS




Lucas junto a su familia

Ayer fue muy emocionante encontrar a Lucas Osorio en la premiación del Colegio International Country School.

Lucas entró al colegio este año. Sus papás y él estaban un tanto temerosos por ingresar a un sistema tradicional. Lucas había asistido a colegios alternativos y a homeschool. Ante la incertidumbre y no saber cómo abordar el tema, decidieron buscar ayuda profesional y es así como llegaron a MIS CLASES PARTICULARES.

Lucas y yo estuvimos trabajando enero y febrero 2015, reforzando y repasando los contenidos más débiles y adquiriendo interesantes técnicas de estudio a través de juegos y dinámicas. A pesar de que era verano, Lucas trabajó con gran entusiasmo y dedicación. 
Uno de los hechos más interesantes que sucedió durante nuestras clases, fue que Lucas empezó a tomarle el gusto a la lectura, y los comics fueron sus primeros libros para luego seguir con cuentos, leyendas, artículos de periódicos y novelas.


Luego de cada clase me reunía con el papá o la mamá y comentábamos la clase, llegábamos a acuerdos en la forma de trabajo y estudio, y les entregaba consejos de cómo enfrentar el año escolar y controlar la ansiedad y nerviosismo por el hecho de ingresar a un colegio nuevo.


Lucas y yo
Lucas no sólo está feliz e integrado con sus compañeros, sino que tuvo un muy buen desempeño escolar. Es verdad, el inicio fue un poco difícil, pero con el apoyo de su familia y con el trabajo que hicimos en conjunto se pudo desempeñar exitosamente, logrando eximirse de 3 exámenes y ser reconocido por su responsabilidad.

Te felicitamos Lucas. La perseverancia es clave para lograr nuestras metas y tú ya lo sabes.

Un abrazo gigante.

Nos vemos pronto.

Karolina Sánchez.